jueves, 7 de junio de 2012

"Corpus" en Granada: Uno de esos tres jueves del año que relucen más que el sol


Hoy es un día grande en Granada. Según reza el dicho popular "tres jueves tiene el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y el Día de la Ascensión", y hoy es uno de ellos. Hoy es CORPUS CHRISTI. Ciertamente lejos quedan ya esos tres grandes jueves que pregonaban los tres grandes momentos de nuestra fe. El devenir de los acontecimientos y el tiempo ha hecho que en muchos lugares de España sólo se conserve uno o incluso ninguno de esos tres días, pero en Granada, además del Jueves Santo que sigue siendo festivo, sí tenemos la suerte, inmensa, junto a Sevilla y Toledo, de gozar de este otro Jueves magno, uno de los días más importantes en la ciudad si no el más importante de ellos. 

Desde 1989, por acuerdo del Gobierno de España con la conferencia episcopal, la festividad del Corpus fue trasladada al domingo siguiente, pasando el jueves a ser día laborable. Sin embargo, aunque la solemnidad litúrgica sea en domingo, diversas ciudades celebran la procesión con el Santísimo en el jueves tradicional, que es declarado fiesta local por sus respectivos ayuntamientos. Este es el caso de Granada, que celebra sus días grandes, sus días de feria, que tienen en el jueves de Corpus el día fundamental y supremo. 

                               Los reyes Católicos, en forma de gigantes, tienen un 
                       lugar destacado  en  el  Corpus en la 'Pública' de las 
                       Fiestas.

Es una de la fiestas más antiguas de España. La crearon los Reyes Católicos tras la conquista de la ciudad en 1492, y es que el crucial acontecimiento militar y político de la Toma de Granada tuvo una repercusión transcendental en la vida cotidiana de los habitantes de Granada y sus alrededores. Los Reyes Católicos se encargaron de legislar sobre cualquier aspecto social, pretendiendo cristianizar cuanto antes a una población que tantos siglos había vivido en una cultura árabe. Y, aunque muy pronto introdujeron ritos y ceremonias cristianas, logró sobrevivir un buen número de tradiciones populares, dándose el caso de que, al final, el resultado de todo fue un sincretismo cultural de los más singulares de Andalucía y España.

                 Cuadro de la rendición de Boabdil ante los Reyes Católicos.
                     Obra de Francisco Pradilla (Palacio del Senado, Madrid)
La salida de la procesión del Santísimo Corpus Christi marca el momento culminante de estos días festivos, manteniéndose aún la tradición de erigir altares a lo largo del recorrido procesional que desde las 10:30 de la mañana de hoy ha recorrido las calles del centro de la ciudad con su larga comitiva. En la actualidad la Custodia es sacada en un trono realizado por el orfebre y escultor granadino Miguel Moreno.
                                         Trono y Custodia de Granada
Estas fiestas que, como ya se ha dicho, fueron creadas institucionalmente por los Reyes Católicos como Fiesta Mayor tras la conquista de la ciudad, copió el modelo de la procesión de Sevilla que, por entonces, era la más suntuosa de España. Desde el principio, el arzobispo Hernando de Talavera (el Santo Alfaquí como era llamado por los moriscos de la ciudad) se encargó de que todos los sectores de la población granadina se sintiesen representados y así consta que salían zambras moriscas en el cortejo. Lo cierto es que la celebración del Corpus arraigó pronto en las costumbres de los habitantes de la ciudad, de modo que en pocas décadas fueron olvidados prácticamente los ritos islámicos que se habían venido celebrando por incontables generaciones de granadinos durante la dominación islámica. 
A pesar de que el Corpus Christi, trataba de ser superado año tras año, alcanzando en la época del Barroco su máxima grandeza y majestuosidad, no llegó a ser nunca una fiesta mundialmente conocida como son las Fallas valencianas, la Feria de Abril sevillana o los Sanfermines pamplonicas, aunque, siempre han tenido un gran seguimiento y una aceptación popular grandiosa en todas las épocas, dejando una profunda huella en ciudades vecinas y en todas las zonas de influencia de Granada, especialmente en los pueblos de la Vega, muchos de los cuales estaban obligados a contribuir a su celebración y al engalamiento de la ciudad, enviando carros de bueyes cargados con juncia, mastranzo, romero, espadaña y otras hierbas que exhalan en el ambiente, un profundo aroma a primavera al paso de la procesión del Santo Sacramento. Aún hoy se conserva la tradición de cubrir de hierba las calles de la ciudad por las que procesiona la Custodia con el Santísimo. 
        Charangas, gigantes y la Tarasca, al fondo, en la 'Pública de las Fiestas'
Ya desde aquellos primeros años desfilaban diversos carros en los que se escenificaban pasos y juegos teatrales, algo muy parecido a los que hoy se conoce como 'Pública de las Fiestas' en el que desfilan los célebres gigantes y cabezudos junto a la popular "Tarasca", así como representaciones históricas de la Granada histórica desde la época de los Reyes Católicos. 
                             Pública de las Fiestas del Corpus de Granada
Pero las fiestas del Corpus van más allá y son muchísimas las actividades lúdicas y culturales que se celebran durante estos días en la ciudad de la Alhambra. En la Plaza de Bibarrambla se exponen las denominadas "carocas", viñetas con quintillas alusivas, en tono satírico, a acontecimientos ocurridos en la ciudad o en la actualidad nacional e internacional durante el año transcurrido. En ese mismo escenario tiene lugar el Corpus infantil, con atracciones para los niños y los tradicionales "chacolines", un teatro de títeres y marionetas que cada tarde de Corpus hace las delicias de la chiquillería. 


La Feria en sí, que comienza el lunes anterior al jueves del Corpus y finaliza el domingo siguiente, se traslada a un recinto a las afueras de la ciudad, con casetas y atracciones de todo tipo. Asimismo hay distintas exposiciones, conciertos y espectáculos teatrales a lo largo de estos días festivos en distintos escenarios de la ciudad, sin olvidar la feria taurina.




Sobre el origen de la fiesta del Corpus Christi, han sido muchos los tratados que han expuesto las distintas teorías que circulan sobre el mismo. Posiblemente la fuente más fiable sea la descripción histórica y ceremonial que de la fiesta hizo el canónigo de la Catedral Fray Francisco Tomás María de Cardera durante la celebración del Corpus granadino de 1765, quien apunta en su Relación, cómo desde el momento mismo en que Jesucristo instituyó el Sacramento del Altar en la Última Cena, la Eucaristía fue venerada por la iglesia Católica. 


No obstante, la fiesta propiamente dicha tuvo su principio en Bélgica, más concretamente en la ciudad de Lieja, en pleno siglo XIII, cuando en el monasterio de Monte Cornilon en el año 1230, una monja llamada Juliana, famosa por sus virtudes y profecías, observó que cuando rezaba, frecuentemente se le aparecía la luna llena ensombrecida por una de sus partes, lo que fue interpretado en el sentido de que la Iglesia Católica, que era simbolizada por la luna, estaba triste y oscurecida por la falta de una fiesta que celebrase el Sagrado Cuerpo de Cristo, la cual habría de instituirse para el aumento de la fe de los hombres. 

Conocido el hecho por distintos teólogos de la época, como Juan de Lausenna, San Martín de Lieja y, el que a la postre sería el más decisivo, Jacobo Pantaleón, que sería el futuro Papa Urbano IV, en 1262 acordándose de las profecías que le fueron relatadas por la madre Juliana, instauró la fiesta con carácter universal mediante la famosa Bula Transiturus de hoc Mundo ad Patrem, reiterándola dos años más tarde, en 1264, mediante un diploma dirigido a Eva de Lieja. Quiso el Papa que para la completa solemnidad de la fiesta se compusiese Oficio propio, encargándose a Santo Tomás, si bien, a pesar de esto y del reconocimiento de Urbano IV, el rito litúrgico fue observado tan sólo desde un principio, por la iglesia de Lieja, por lo que hubo de extenderlo Clemente V mediante la confirmación que de la festividad hizo en el Concilio de Vienne en 1311, y posteriormente en 1316, por el Papa Juan XXII. 

Por lo que respecta a la procesión fue instaurada, según Fray Francisco Tomás María de Cardera, por Urbano IV sobre la base del milagro de Bolsena, celebrándose su ceremonial en acción de gracias por el beneficio de su institución, para pedir perdón por los defectos de todo el año y para corroborar la fe de los fieles. 


La introducción de la fiesta en España tiene lugar en la primera mitad del siglo XIV, siendo en Barcelona, Lérida y Valencia donde ocurrieron las primeras celebraciones, extendiéndose posteriormente a Toledo y Sevilla, ciudades en la que alcanzaría un lucido esplendor. En la Alta Andalucía, hay constancia de que en 1490 era celebrada en Málaga –inmediatamente después de la Conquista
 mientras que habrá que esperar prácticamente al siglo XVI para encontrar su celebración en Jaén y en Granada, ciudad a la que se le impuso como fiesta principal, como se ha señalado. 


La fiesta en Granada dispone de una particular historia llena de vicisitudes y altibajos, que para conocerla, así como sus aspectos principales, es recomendado leer entre otras, las obras de Francisco de Paula Valladar ("Estudio Histórico-Crítico de las Fiestas del Corpus en Granada") y de Miguel Garrido Atienza ("Las Fiestas del Corpus", editada en Granada en 1889, que es sin duda alguna la mejor de las realizadas hasta el momento). En ellas podremos conocer los aspectos más relevantes de la festividad y aquellos elementos destacados de su celebración y ceremonial, como la procesión, la Pública, las carocas, y la Feria entre otros. 

Desde aquí, este humilde cronista, te invita a que algún año te pases por Granada para vivir estos días de fiesta plenos y felices. ¡¡¡Ven a conocer nuestro Corpus!!! No te defraudará. 

domingo, 8 de abril de 2012

Hoy es... DOMINGO DE RESURRECCIÓN



La Pascua es la fiesta central de los cristianos, iniciándose con este primer domingo que recibe el nombre de DOMINGO DE RESURRECCIÓN al rememorar la Resurrección de Jesucristo de entre los muertos que, de acuerdo a los Evangelios, se produjo al tercer día después de haber sido crucificado. Este tiempo pascual, que comienza en el día de hoy dura cincuenta días, terminando el Domingo de Pentecostés. 
El Domingo de Resurrección es una fiesta móvil ya que no tiene una fecha fija en el calendario sino que oscila en base a lo establecido en el año 325 en el I Concilio de Nicea que estableció la fecha de la Pascua como el primer domingo después de la luna llena tras el equinoccio de primavera en el hemisferio norte. La fecha, por tanto, varía entre el 22 de marzo y eñ 25 de abril. 


Durante este día se celebran en distintos lugares del mundo procesiones religiosas, así como celebraciones litúrgicas. Las costumbres del Domingo de Resurrección varían en todo el mundo cristiano, pero la decoración los "huevos de Pascua" es un algo común en el mundo cristiano occidental.


Los primeros cristianos ―que eran judíos― celebraban en un primer momento la Pascua de Resurrección a la par cronológica que la Pascua judía. Pero, como ya señalábamos antes, desde el Concilio de Nicea del año 325 los cristianos separaron la celebración de la Pascua judía de la cristiana, quitándole los elementos hebreos, si bien se respetó el carácter móvil de la fiesta recordando que Cristo resucitó en la Pascua hebrea.



Esta fiesta determina el calendario móvil de otras fiestas: así la Ascensión (el ascenso de Jesús al cielo) se celebra cuarenta días después de Pascua, y Pentecostés (la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles) diez días después de la Ascensión. 
Etimológicamente «pascua» significa "paso" al proceder del hebreo que refiere su pascua al paso del Mar Rojo con el que el pueblo de Israel se libró de la opresión de Egipto, al que estuvo sometido como esclavos durante muchos años. Para los cristianos, el "paso" hace referencia al paso de la muerte a la vida, a la resurrección a la vida eterna de mano de Jesucristo. 


Para los cristianos la resurrección de Jesús es el fundamento de nuestra fe cristiana. La resurrección estableció una nueva alianza perpetua de Dios con el mundo al dar a los cristianos "un nuevo nacimiento a una esperanza viva por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos". 
La Semana Santa, y la Pascua en particular, está ligada a través de la Última Cena y la crucifixión de Jesús a la Pésaj (Pascua Judía) y al Éxodo del pueblo hebreo narrado en el Antiguo Testamento. De acuerdo con las Escrituras, Jesús, mientras preparaba a sus discípulos y a Él mismo para su muerte durante la Sagrada Cena, dio a la cena de Pascua un nuevo significado al identificar el pan y el vino como su cuerpo  antes de ser sacrificado y su sangre derramada, instituyéndose así la Eucaristía, tal y como ya relatamos en la entrada que dedicamos al Jueves Santo. 


Como ha sucedido durante toda la Semana Santa, en multitud de lugares de España se celebran procesiones que, en este caso, conmemoran la Resurrección, poniendo punto final a la celebración de estos días. Muchas de ellas tienen como punto más destacado el Encuentro entre las imágenes de la Virgen y Cristo Resucitado.

  • En CARTAGENA procesiona la Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Resucitado, desde el santo Ángel de la Cruz Triunfante hasta San Juan (del Resucitado) y la Santísima Virgen del Amor Hermoso.
  • En CUENCA tiene lugar la Procesión del Encuentro que nace partida en dos, Jesús Resucitado por una parte, y la Virgen del Amparo por otra, celebrando el Encuentro de ambas imágenes entre tracas y vuelos de palomas.
  • En ZAMORA se realiza la Procesión del Encuentro con las imágenes de Jesús Resucitado y la Virgen, acompañados de la Guardia Civil y otro del cuerpo de Policía, para juntarse en la Plaza Mayor, donde el manto de luto de la Virgen cae al suelo.
  • En HELLÍN, (Albacete), tiene lugar el Encuentro entre las imágenes de la Dolorosa y el Resucitado. La tamborada continúa, cesando tan sólo unos minutos durante el encuentro entre ambas imágenes.
  • En MÁLAGA procesionan el Santísimo Cristo Resucitado y María Santísima Reina de los Cielos.
  • Tres cofradías protagonizan el primer Domingo de Pascua en GRANADA. Por la mañana, la procesión infantil de Los Facundillos llenan de alegría las calles de la ciudad con el tañer de las campanas de barro que hacen sonar los niños al paso de un Niño Jesús Triunfante atribuida hasta fechas recientes a Torcuato Ruiz del Peral, aunque parece que no fue el autor de la imagen. También por la mañana procesiona el paso de misterio de Jesús Resucitado, apodado como el Resucitado de Regina Mundi, ya que tiene su sede apostólica durante el año en este templo aunque sale y se recoge durante la procesión del Domingo de Resurrección desde la Iglesia del Sagrario junto a la Catedral de la ciudad. Ya, por la tarde, otro Resucitado, el del Zaidín (al salir de este popular barrio granadino) cierra la Semana Santa de la ciudad de la Alhambra junto a Nuestra Señora del Triunfo. 


  • En MURCIA sale a la calle otro Resucitado procesionando un total de once hermandades además del popular personaje del Demonio encadenado.
  • La Semana Santa de SALAMANCA culmina con la procesión de la Resurrección organizada por la Cofradía de la Vera Cruz. Durante la misma se escenifica el Encuentro entre las imágenes del Resucitado y la Virgen de la Alegría, que en ese instante de despoja del luto, en el marco de la Plaza Mayor.
  • En SEVILLA, el punto final a su Semana Santa lo pone la salida de la Hermandad de la Resurrección. 
  • Terminamos la entrada, la última de la Semana Santa, refiriéndonos a la Procesión de las Aleluyas en ELCHE, donde la ciudad se llena de papelitos de colores con mensajes relativos a la Resurrección del Señor a lo largo de la procesión de Resurrección. 


sábado, 7 de abril de 2012

Hoy es... SÁBADO SANTO


El Sábado Santo (denominado hasta la reforma litúrgica de 1955 Sábado de Gloria) es el tercer día del Triduo Pascual, que concluye con la celebración de la Vigilia Pacual que da inicio al Primer Domingo de Pascua (Domingo de Resurrección) con el que culmina la Semana Santa. Tras conmemorar el día anterior la muerte de Cristo en la Cruz, se espera el momento de la Resurrección. Durante el Sábado Santo  la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y su muerte, su descenso a los infiernos y esperando en oración y ayuno su resurrección.

Pueden ser expuestas en la Iglesia para la veneración de los fieles, la imagen de Cristo crucificado o en el sepulcro (descendiendo a los Infiernos) ya que ilustran el misterio del Sábado Santo. Hoy la Iglesia se abstiene absolutamente del sacrificio de la Misa. La Sagrada Comunión puede darse solamente como viático. No se celebra el Sacramento del Matrimonio, ni se administran otros sacramentos, a excepción de la Penitencia y la Unción de los Enfermos. Como no puede celebrarse ningún rito oficial durante el día se suelen predicar retiros espirituales. También es costumbre en algunos templos el rezo de la Liturgia de las Horas por parte de los clérigos con participación de fieles seglares. Otros, simplemente, cierran sus puertas.


Es el día del silencio. La comunidad cristiana vela junto al sepulcro. Callan las campanas y los instrumentos. Se ensaya el aleluya, pero en voz baja. Es día para profundizar. Para contemplar. El altar está despojado. El sagrario, abierto y vacío. La Cruz sigue entronizada desde la tarde del Viernes Santo. Central, iluminada, con un paño rojo, con un laurel de victoria. Dios ha muerto. Ha querido vencer con su propio dolor el mal de la humanidad.

Es el día de la ausencia. El Esposo nos ha sido arrebatado. Día de dolor, de reposo, de esperanza, de soledad. El Sábado Santo es el día en que experimentamos el vacío, pero desde la esperanza. Es un día de meditación y silencio. Algo parecido a la escena que nos describe el libro de Job, cuando los amigos que fueron a visitarlo, al ver su estado, se quedaron mudos, atónitos ante su inmenso dolor: "se sentaron en el suelo junto a él, durante siete días y siete noches. Y ninguno le dijo una palabra, porque veían que el dolor era muy grande" (Job. 2, 13).


Pese a todo el Sábado Santo no es un día en el que "no pasa nada". Tampoco se trata de un  duplicado del Viernes. La gran lección es ésta: Cristo está en el sepulcro, ha bajado al lugar de los muertos, a lo más profundo a donde puede bajar una persona. Y junto a Él, como su Madre María, está la Iglesia, la esposa. Callada, como él. 

El Sábado está en el corazón mismo del Triduo Pascual. Entre la muerte del Viernes y la resurrección del Domingo nos detenemos en el sepulcro. Un día puente, pero con personalidad. Son tres aspectos de un mismo y único misterio, el misterio de la Pascua de Jesús: muerto, sepultado, resucitado.


Hasta la reforma litúrgica de la Semana Santa acometida por el Papa Pío XII (como una especie de anticipo a la reforma litúrgica general del Concilio Vaticano II) se llamaba a este día Sábado de Gloria, pues la celebración de la Resurrección (la Vigilia Pascual) tenía lugar ya en la mañana del sábado. En 1951 Pío XII permitió, mediante el inesperado decreto “Dominicae Resurrectionis” de 9 de febrero (Vid. AAS 43 (1951), pp. 128-129), que la vigilia se realizase de noche, lo que tras otro decreto, el “Maxima Redemptionis” de 16 de noviembre de 1955 (Vid. AAS 47 (1955), pp. 838-841), fue obligatorio a partir de 1956. Desde entonces dicha Vigilia se celebra más razonablemente en horas de la noche,  y el Sábado Santo queda para los católicos, como ya se ha explicado, como un día para la reflexión y la espera, para la soledad y el desierto, expectante por la gran celebración que tendrá lugar unas horas más tarde.


La Iglesia Católica también conmemora hoy la Soledad de María después de llevar al sepulcro a Cristo, quedando en compañía del Apóstol Juan.  El Evangelio nos dice que el domingo por la mañana las mujeres fueron al sepulcro para ungir el cadáver de Jesús (Marcos 16,1-8), señal de que la tristeza por la muerte del Señor les hizo olvidar el anuncio de la Resurrección. Pero ¿qué hizo la Virgen aquel día de espera antes del Domingo? Los evangelios no nos dicen nada de ella, ni siquiera que Jesús se le apareciera como a las otras mujeres.
Hoy era el día de su soledad, su Hijo ya estaba enterrado, ya no estaba con ella, como reflejan los Sagrarios vacíos y con la puerta abierta en todas las iglesias del mundo; nos hacemos acompañantes de la soledad de María. Parece como si las tinieblas hubieran vencido finalmente a la luz, como si nos quedáramos huérfanos, aunque no del todo pues Cristo nos dejó en la cruz la presencia maternal de su propia Madre (cf. Juan 19,26-27).
Podemos imaginar que María pasó aquel Sábado santo como siempre había vivido todo lo que le ocurrió a su hijo, confiando por la fe y fiándose de Dios. Así fue desde aquel día de la Anunciación, como cuando nació Jesús y cuando se pierde en el Templo… María guardaba todo esto en su corazón y lo tenía muy presente (Lucas 2,19.51). María es la mujer de fe, que como dice San Agustín concibió a Jesús antes en el corazón por la fe que en su seno. Y por la fe pudo esperar sin duda la Resurrección de su Hijo, tras haber sufrido tantísimas angustias viéndolo escarnecido y muerto tan horriblemente.
El premio a tan gran sacrificio como madre y a la oscuridad de la fe debió de ser sin duda ver a su Hijo resucitado y glorioso. No nos lo cuentan los evangelios pero podemos suponer e imaginar que Jesucristo quiso hacerse visible a su santísima Madre para compensarla y aliviarla de sus sufrimientos y dolores. En este día de espera María es también nuestro modelo de fe y de esperanza, que como Madre nuestra nos anima y nos consuela.






Una vez ha anochecido, tiene lugar la principal celebración cristiana del año: la VIGILIA PASCUAL. Se trata de una Vigilia en honor del Señor, según una antiquísima tradición de manera que los fieles, siguiendo la exhortación del Evangelio (Lc.12,35 ss), tengan encendidas las lámparas como los que aguardan a su Señor para que cuando llegue los encuentre en vela y los haga sentar a su mesa.



La Vigilia Pascual se desarrolla en este orden:

Breve Lucernario
Se bendice el fuego. Se prepara el cirio en el cual el sacerdote con un punzón traza una cruz. Luego marca en la parte superior la letra Alfa y en la inferior la Omega, entre los brazos de la cruz marca las cifras del año en curso. A continuación se anuncia el Pregón Pascual.



Liturgia de la Palabra
En ella la Iglesia confiada en la Palabra y la promesa del Señor contempla y reflexiona sobre las maravillas que desde los comienzos realizó Dios con su pueblo.

Liturgia Bautismal
Se llama a los catecúmenos, quienes son presentados ante el pueblo por sus padrinos: si son niños serán llevados por sus padres y padrinos. Se hace la renovación de los compromisos bautismales.

Liturgia de la Eucaristía
Al acercarse ya el día de la Resurrección, la Iglesia es invitada a participar en el banquete eucarístico, que por su Muerte y Resurrección, el Señor preparó para su pueblo. En él participan por primera vez los neófitos.


Toda la celebración de la Vigilia pascual se realiza durante la noche, de tal manera que no se vaya a comenzar antes de iniciarse la noche ni después de la aurora del Domingo. La Misa, aunque se celebre antes de la media noche, es la Misa Pascual del Domingo de Resurrección. Los que participan en esta misa, pueden volver a comulgar en la segunda Misa de Pascua. El color de la celebración, como no podía ser de otra forma, es el blanco. 

Paso alegórico de la Hermandad de "La Trinidad" en Sevilla

En algunos lugares de España continúan celebrándose procesiones como lo han venido haciendo el resto de días de la Semana Santa. Seguidamente nos referimos a las que tienen la categoría de Interés Turístico Internacional: 

  • En CARTAGENA la Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno (Marrajos) saca a la calle su última procesión, con la Vera Cruz, la Sábana Santa, las Santas Mujeres, el Santo Amor de San Juan en la Soledad de la Virgen y la Santísima Virgen de la Soledad de los Pobres.
  • En MÁLAGA, la Pontificia y Real Congregación del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas (Patrón y Protector oficial de la Legión Española) y Nuestra Señora de la Soledad llevan a cabo en su parroquia de Santo Domingo "la celebración de la Soledad de María", recordatorio de la antigua misa de privilegio otorgada por Benedicto XIV hace más de 250 años y única misa que se celebraba en todo el mundo en Sábado Santo, que fue sustituida por la actual celebración por Juan Pablo II. Se considera que ese privilegio fue otorgado por un milagro de la Virgen.
  • En MURCIA desfila la la Cofradía del Santísimo Cristo Yacente y Nuestra Señora de la Luz en su Soledad con sus antiquísimos titulares, el Cristo Yacente del siglo XVI y la Virgen de la Luz del XVII.
  • En SALAMANCA la Ntra. Sra. de la Soledad realiza su desfile procesional a las doce de la noche desde la Catedral Nueva. También a primera hora de la madrugada se inicia la marcha penitencial del Stmo. Cristo de la Liberación, sección de la Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz, con gran recogimiento y austeridad. Por la tarde procesiona la Hermandad del Silencio con el Cristo de la Vela y Ntra. Sra del Silencio.
  • En SEVILLA hacen estación de penitencia las hermandades de El Sol, Los Servitas, La Trinidad, el Santo Entierro y la Soledad de San Lorenzo. En la provincia es de interes también la Hermandad de los Dolores de La Rinconada.  Volviendo a la Hermandad de la Trinidad que sale en la tarde del Sabado Santo desde Maria Auxiliadora, queremos resaltar el primero de sus tres pasos, (recogido en las fotografías de más arriba). Recibe el nombre de Sagrado Decreto, y presenta a Jesus ya muerto con una cruz en sus hombros sentado junto a Dios Padre. Tambien se observa una matrona, un angel y un arcángel y hasta un dragón además algunas figuras mas. En siglo XVIII y hasta el año 1951 la hermandad de la Trinidad sacaba en su estación de Penitencia este paso alegórico de hondo sentido teologal y que nuevamente se recupera a partir 1994 para la Semana Santa de Sevilla, incorporándose desde entonces a la estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral. 
  • En VALLADOLID tiene lugar la Procesión de la Soledad.
  • En ORIHUELA se celebra la Procesión del Santo Entierro, dónde desfila La Diablesa.
  • Para terminar, en GRANADA sale la popular Hermandad de Santa María de la Alhambra, una de las más conocidas allende la ciudad, y que tiene su salida desde el mismo monumento de la Alhambra. Como nota curiosa comentar que el poeta Federico García Lorca perteneció a esta cofradía de la que fue hermano.

Otra nota curiosa de la Hermandad de la Alhambra es que este año de 2012 ya no tendrá porteadores del paso por fuera del mismo, algo que a cierta parte de los cofrades de la ciudad no ha terminado de gustar al romperse así una tradición histórica.