Hablar del Sábado Santo cofrade en Granada es referirnos a La Real e Ilustre Cofradía de Penitencia de Nuestra Señora de las Angustias Coronada de Santa María de la Alhambra de Granada, fundada en 1928. Es una de las cofradías de la Semana Santa granadina que más cariño recibe por los vecinos de la ciudad, convirtiéndose así en una de las más ricas y famosas por encontrarse en el recinto de la Alhambra.
Esta Hermandad tiene como objetivo transmitir a la gente la vida cofrade y lo importante que puede llegar a ser la Semana Santa de la ciudad. Nuestra Santa Madre de las Angustias, sosteniendo a su hijo muerto representada en la Sagrada Imagen Titular, es para los granadinos la Reina de la Alhambra y comparte la advocación patronal de Granada.
Cuando en 1925 dejó de celebrarse el desfile antológico del Santo Entierro, en el que la Piedad de Ruiz del Peral venerada en la Iglesia de Santa María ubicada en la Alhambra, había participado desde 1910, tomando entonces el nombre de Santa María de la Alhambra, se iniciaron las gestiones para la constitución de esta Cofradía de penitencia. Tomaba el testigo de la que durante el siglo XIX habían constituido los vecinos de la Alhambra para dar culto a esa imagen conocida entonces como la Virgen de los Dolores, que como fruto de la desamortización, llegó a la que era su parroquia, desde el convento de franciscanos cercano y a la que celebraban cultos en septiembre que concluían con una procesión el día de San Miguel.
Tardó en cristalizar la idea que tuvo en el capellán del templo de Santa María, Emilio Villatoro a uno de sus principales impulsores. Definitivamente se consigue su fundación en el año 1928 y hace su primer desfile procesional en la Semana Santa de año siguiente. Federico García Lorca fue el encargado de portar la Cruz de Guía en aquella estación de penitencia, en cumplimiento de una promesa y se inscribió entonces como hermano de la Cofradía. Partió la comitiva del Palacio de Carlos V, por no ser posible hacerlo del templo donde estaba erigida hasta que al año siguiente se agrandó su puerta lateral.
En 1931 se estrenó el célebre paso que reproduce el patio de los leones como trono para Santa María. A lo largo de los años la Cofradía ha sabido dotarse de un extraordinario juego de insignias, la mayoría de ellas en plata de ley.
Adquirió el carácter de Sacramental en 1990 y nueve años después hizo suyo, por decreto Arzobispal, el título de una antigua Hermandad con este carácter que había sido fundada en la misma Iglesia de Santa María en 1562, la Sacramental de la Santísima Trinidad y Nombre de Jesús.
En el año 2.000 la imagen de Ntra. Señora fue coronada canónicamente por el Arzobispo, hoy Cardenal Primado, D. Antonio Cañizares Llovera.
Esta hermandad del Sábado Santo realiza su estación de penitencia desde la iglesia parroquial de Santa María de la Alhambra, situada en el corazón de este conjunto monumental. La cofradía posee una única titular que procesiona por las calles granadinas; es una obra del barroco granadino, tallada alrededor de 1750 por el maestro Torcuato Ruiz del Peral en madera de encina polícroma. La imagen representa a la Virgen sosteniendo en sus rodillas el cadáver de su hijo muerto.
La magistral piedad, una de las mejores piezas escultóricas sobre el tema en España, inclina la cabeza hacia la derecha y dirige su mirada hacia el rostro de Cristo. Su bello rostro presenta los ojos de cristal, pestañas superiores postizas, nariz alargada y labios cerrados, reflejando un dolor silente y recogido. Tres lágrimas de cristal corren por sus mejillas, dos por la derecha y una por la izquierda. La mano derecha sostiene la cabeza de Jesús mientras la izquierda se aferra a su mano derecha. La efigie es de talla completa, presentando la túnica y el manto esculpidos en la misma madera, y policromados en tonos jacinto y azul cobalto, respectivamente. Se exorna con corona de oro y plata de ley, con pedrería variada, diamantes y esmeraldas, perlas naturales y un topacio de 36 kilates, cincelada por Moreno Romera (2000), y puñal de oro, plata y brillantes, de Villarreal (1979).
La frágil hechura cristífera, carente de advocación como es tradicional en las imágenes de las angustias o piedades, muestra la cabeza ladeada hacia el lado derecho. Carece de potencias y corona de espinas. El dramático semblante ofrece los signos propios de una muerte violenta. Los ojos, semicerrados, son vítreos y las pestañas del párpado superior de pelo natural. La nariz es aguileña y la boca, entreabierta, permite ver la dentadura tallada. La cabellera es larga y ondulada y el brazo derecho del Varón se desploma elegantemente hacia el suelo. El sudario lo constituye un paño ancho e irregular que envuelve con varias vueltas la cintura de Jesús. Las piernas conservan cierta rigidez de la postura tomada en el madero. Su policromía es lívida, al igual que María, lo que hace destacar las heridas y cardenales repartidos por todo su cuerpo.
La cruz, labrada en taracea con madera de cedro, naranjo, marfil y nácar, es de sección lisa y rectangular. Es obra de los hermanos Molero. Está adornada con remates y ráfagas en plata de ley de Francisco Villarreal. De la misma pende sudario de blonda bordada en seda, teniendo la hermandad varios que alterna en salidas y funciones. A resaltar uno con diseño de Francisco de Goya, bordado por Trinidad Morcillo.
No obstante, la joya característica de la hermandad es el trono procesional, realizado en plata, representando a escala el famoso patio de los Leones de la Alhambra. La capillas con bajorrelieves de la pasión son de plata bañada en oro de ley. Realizado en 1928 por Indalecio Ventura ha sido restaurado, agrandado y terminado con peana de estilo nazarita ejecutada en plata de ley por Francisco Villarreal. Es portado por 80 costaleros, con varales externos, rematados por ocho leones en plata, reproducción de los que sostienen la fuente del patio alhambreño.
El impresionante juego de enseres, la mayoría en plata de ley, con bordados de oro y plata, y el equipo penitencial, con capa, y realizado en damasco de seda crema y azul, con los escudos bordados en sedas, hacen de esta Hermandad en la calle una de las más características de la semana santa granadina. Su extraordinario recorrido por el interior de la Alhambra no tiene parangón.
El pasaje evangélico al que corresponde la imagen viene reflejado en el libro de Juan: "Tomaron, pues, el cuerpo de Jesús y lo amortajaron con lienzos y aromas, según acostumbran los judíos enterrar" (Jn, 19, 40).
Esperemos poder disfrutar este Sábado Santo con la bellísima imagen de Santa María de la Alhambra por la calles de la ciudad. Verla bajar desde el hermosisímo entorno de la Alhambra es un auténtico lujo. ;)
ResponderEliminaraqui hoy sabado no llueve pero hoy no hay aqui ninguna cofradia , por cierto bonita imagen la de esta cofradia
ResponderEliminarEspero con impaciencia que no se estropee la tarde para ver salir a esta hermosura.Esta mañana ha estado el sol fuera y aunque despues se ha intercalado con las nubes parece ser que no hay prevista lluvia según los metereólogos.Me parece recordar además que a la vuelta se había modificado algo el itinerario habitual.
ResponderEliminar