El Martes Santo en Granada se cierra en el Realejo. De la iglesia de Santo Domingo sale la popular Cofradía de la Cañilla, llamada así porque represenat el momento en que el Señor, tras ser azotado, recibe las burlas de los romanos por considerarse 'Rey', le colocan un manto color púrpura y una 'cañilla' a modo de cetro real.
La imagen del Señor de la Humildad, que hoy se venera en la Parroquia de Santa Escolástica (Iglesia de Santo Domingo), procede, en sus orígenes, del convento Belén de los Mercedarios Descalzos.
El misterio que conforma el primer paso nos muestra a un Jesús de bello rostro, mirada fija y paciente resignación ante el dolor del castigo y la incomprensión en la burla. Para completar la escena de la coronación de espinas aparecen cuatro figuras más, dos de ellas esculpidas por Espinosa Cuadros, un sayón y el romano, mientras que en 1999 se añadió un sayón más y en 2001 aparece también un sanedrita, estas dos últimas tallas realizadas por el escultor Ángel Asenjo Sedano.
La Soledad de Nuestra Señora es una de las pocas imágenes de talla completa y sin palio que procesionan en nuestra Semana Santa, obra de Manuel González, el cual recrea perfectamente la tradición escultórica granadina.
En el año 2000 comenzó la Cofradía de La Cañilla a dar forma a un nuevo paso para su misterio, que sustituía al que realizaran décadas antes Manuel Cuerva y Moreno Carrasco. Los respiraderos, canastilla y candelabros de guardabrisas han sido realizados por el tallista Julián Sánchez y la hermandad ha ido completando año a año su talla y dorado.
El paso de la Soledad de Santo Domingo es neobarroco, realizado en caoba y plata por A. Moreno. La orfebrería que presenta el paso es de plata de ley, realizado por el taller de Hijos de J. Fernández. En la decoración destacan elementos como las cartelas con motivos pasionistas, los doce guardabrisas que iluminan el paso o el escudo de la Hermandad. En las esquinas del paso aparecen en plata faroles y ángeles pasionistas. De orfebrería son también los broches que cierran los faldones del paso.
Así concluyó, en la madrugada del Martes al Miércoles Santo de 2011, su estación de penitencia esta popular hermandad del Realejo granadino.
Una de las cosas que más me asombran es la perfecta sincronización que hay entre el capataz que dirige el paso con los costaleros que van debajo de él;pasan prácticamente rozando los laterales de la puerta de la iglesia sin llegar a tocarlos.A veces,como ocurre en esta ocasión con el paso de la Virgen, hay que rebajar un poco la altura de la cruz para luego volver a elevarla una vez salida del templo.¡Verdaderamente digno de ver!
ResponderEliminarMe alegro que te guste Eduardo!! ;-)
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